Colombianos en el Mundo

Mientras en Palmeiras gana 1.300 millones, la mínima cifra que cobraba Richard Ríos en el Futsal

Su historia de superación impresiona: así cambió su vida el fútbol profesional.

Por David Arengas

Richard Ríos tuvo un inicio muy humilde antes de romperla en Palmeiras. Foto: Pexels, SE Palmeiras y Escudoteca
Richard Ríos tuvo un inicio muy humilde antes de romperla en Palmeiras. Foto: Pexels, SE Palmeiras y Escudoteca

La historia de Richard Ríos es un testimonio inspirador de perseverancia y talento, un viaje asombroso desde las canchas de futsal aficionado en Colombia hasta la élite del fútbol brasileño con el Palmeiras, acompañado de un cambio salarial que refleja su meteórico ascenso.

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En el año 2018, mientras aún mostraba su calidad en el fútbol sala, Richard Ríos compaginaba su pasión con la necesidad económica, participando simultáneamente en cuatro torneos aficionados. Por cada partido disputado en aquellos certámenes, su remuneración oscilaba entre los $15.000 y $20.000 pesos colombianos. Una cifra modesta que contrasta drásticamente con su realidad actual.

Siete años después, en 2025, Richard Ríos se ha consolidado como un mediocampista clave en el poderoso Palmeiras de Brasil. Su contrato, que se extiende hasta el año 2028, le reporta un salario mensual aproximado de 300.000 euros, una cifra astronómica que se traduce en alrededor de 1.324 millones de pesos colombianos.

Para dimensionar aún más este salto económico, si el salario mensual de Ríos se dividiera entre un promedio de cinco partidos que disputa cada mes con el Palmeiras, el volante colombiano estaría percibiendo la impresionante suma de 260 millones de pesos colombianos por cada encuentro.

Esta asombrosa transformación salarial subraya el valor que Richard Ríos ha adquirido en el fútbol profesional gracias a su talento, dedicación y el exitoso desarrollo de su carrera. Del futsal aficionado, donde sus ingresos apenas superaban los veinte mil pesos por partido, ha escalado hasta convertirse en un futbolista de renombre en Sudamérica, con un salario que supera los mil millones de pesos mensuales. Su historia es un claro ejemplo de que los sueños, con esfuerzo y calidad, pueden alcanzar cifras inimaginables.


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