Lo querían sacar y cuatro razones por las que David González debe seguir en Millonarios

A las puertas de los cuadrangulares semifinales del fútbol colombiano, la figura de David González en el banquillo de Millonarios sigue siendo objeto de debate. Mientras algunos sectores de la afición claman por cambios, un análisis más profundo de su gestión revela cuatro pilares fundamentales que sustentan su permanencia, incluso si el anhelado título no llega en esta fase final.

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1. Récord histórico: 38 puntos y campaña de élite en torneos cortos

Uno de los argumentos más contundentes a favor de David González es el rendimiento numérico en la fase regular. Con 38 puntos en el actual semestre, Millonarios ha logrado la cuarta mejor campaña en la historia de los torneos cortos. Este registro no solo es testimonio de una notable regularidad, sino que también le otorgó el codiciado "punto invisible", una ventaja crucial en los cuadrangulares. Superar las expectativas en un formato tan exigente como el colombiano, acumulando una cantidad de puntos tan elevada, habla de un trabajo metódico y efectivo que pocas veces se le reconoce.

2. Gestión de recursos: Nómina corta y desafíos de nivel

El contexto en el que González ha operado no ha sido idílico. Ha tenido que lidiar con una nómina corta y, en varios momentos, con jugadores que no han estado en su mejor nivel o que han sufrido constantes lesiones. Pese a estas limitaciones, el equipo ha mantenido una competitividad envidiable, demostrando la capacidad del cuerpo técnico para exprimir el máximo potencial de los futbolistas disponibles. No se trata solo de ganar, sino de hacerlo con los recursos a mano, una señal clara de adaptabilidad y manejo de grupo.

3. La apuesta por el futuro: Rodaje a la cantera

Un pilar fundamental de la sostenibilidad de un club es el desarrollo de sus jóvenes talentos. En este aspecto, David González ha demostrado una visión de futuro. Ha dado rodaje a la cantera, integrando a jóvenes promesas en el primer equipo y dándoles minutos valiosos en un entorno de alta competencia. Esta inversión en el talento propio no solo asegura recambios para el futuro, sino que también fortalece la identidad del club y genera un sentido de pertenencia en los jugadores, un activo invaluable que va más allá de los resultados inmediatos.

4. Punto invisible en el primer semestre: Una ventaja construida con mérito

La obtención del "punto invisible" en su primer semestre de gestión es un logro que no debe subestimarse. En un torneo donde cada punto cuenta y la fase regular es un maratón, asegurar esta ventaja estratégica para los cuadrangulares es un claro indicio de que el equipo, bajo su dirección, ha sabido ser consistente y eficaz cuando más importa. Este beneficio le otorga una tranquilidad importante en la fase decisiva y es fruto de un trabajo bien planificado desde el inicio de la temporada.

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Mientras los cuadrangulares están a punto de arrancar, la pregunta sobre la continuidad de David González se mantiene. Sin embargo, los números, la gestión de una plantilla limitada, la apuesta por los jóvenes y la obtención del punto invisible son argumentos de peso que invitan a una reflexión profunda. Más allá del resultado final en esta fase decisiva, la dirección técnica de González ha dejado huellas de un proyecto con fundamentos sólidos que, para muchos, merece seguir evolucionando en el 'embajador'.