Insostenible, 3 razones por las que Javier Gandolfi no debería seguir en Nacional

El Atlético Nacional ha cerrado su participación en los cuadrangulares semifinales de la Liga BetPlay 1 2025 con un balance desolador: apenas 5 puntos de 15 posibles. Este rendimiento, muy por debajo de las expectativas de una de las hinchadas más exigentes del continente, ha puesto el puesto del entrenador argentino Javier Gandolfi en el ojo del huracán, apenas unos meses después de su llegada al banquillo 'Verdolaga' tras la era de Efraín Juárez. Tres puntos clave siembran serias dudas sobre su continuidad al frente del equipo.

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1. Falta de Explosividad Ofensiva: Un Ataque Sin Norte

Uno de los mayores interrogantes en la gestión de Gandolfi ha sido la notoria falta de explosividad y contundencia en el ataque de Nacional. A pesar de contar con nombres importantes en la plantilla, el equipo mostró una alarmante inoperancia ofensiva. Jugadores clave como Andrés Román han exhibido un bajo nivel, mientras que las aportaciones de Billy Arce y Marino Hinestroza no lograron ser determinantes. La afición y la prensa cuestionan si el entrenador logró gestionar adecuadamente a estos talentos, buscando refuerzos o implementando variantes tácticas que pudieran desatascar la ofensiva. La dependencia de individualidades y la ausencia de un plan claro para generar peligro constante fueron evidentes a lo largo del cuadrangular.

2. Ausencia de Liderazgo y Rendimiento Pálido: El Fantasma de la Irregularidad

Atlético Nacional, históricamente conocido por su imposición en la cancha y su jerarquía, ha mutado bajo la dirección de Gandolfi en un elenco pálido, sin la personalidad y el liderazgo que se esperan de un club de su envergadura. Los síntomas de esta fragilidad no son nuevos; ya se venían observando desde su participación en la Copa Libertadores, donde el equipo mostró vulnerabilidades. Los números son contundentes: en sus últimos cinco partidos, Nacional solo consiguió una victoria, empatando tres y sufriendo dos derrotas. Esta estadística refleja una preocupante irregularidad que un equipo de la talla de Nacional no puede permitirse, y que se asocia directamente con la capacidad del cuerpo técnico para infundir carácter y competitividad.

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3. La Ausencia de Autocrítica: Un Proceso Cuestionado por la Exigencia Verdolaga

Quizás el punto más crítico para la continuidad de Javier Gandolfi radica en la percepción de falta de autocrítica por parte del estratega. Sus declaraciones, en las que hacía referencia a la necesidad de "tiempo y proceso", chocan frontalmente con la historia y la exigencia desmedida de la hinchada de Atlético Nacional. Es un público que, acostumbrado a ganar ligas, copas y superligas de manera reciente, no entiende de períodos de adaptación prolongados cuando la inversión y la nómina lo exigen. La sensación de que el entrenador no reconocía plenamente las herramientas a su disposición o minimizaba la urgencia de resultados ha generado un distanciamiento con la afición, poniendo su continuidad en la cuerda floja a pesar de la corta duración de su ciclo.